San Salvador es epicentro de la cuenca arrocera nacional, polo agroindustrial, un compendio de empuje y dedicación que nos ha permitido posicionarnos como una ciudad de perfil dinámico, constituyendo un encuentro entre el campo y la industria.
Nuevos proyectos de ciudad evidencian el desarrollo; sin embargo, hemos crecido sin olvidar nuestras raíces. Somos un pueblo grande, de gente amable, de emprendedores y obstinados soñadores; nacidos del encuentro de muchos mundos pero con el mismo sentimiento por esta tierra compartida.
Nuestros amplios bulevares conectan cada rincón de la ciudad y la dividen en macromanzanas de callecitas tranquilas. Los espacios públicos acompañan al desarrollo urbano, apostando a la integración comunitaria y fortaleciendo los ambientes saludables.
La heroica defensa de Arroyo Grande, el legado colonizador de nuestro abuelos inmigrantes y la osadía de aquellos visionarios que sembraron las primeras semillas de arroz, son parte del ADN sansalvadoreño. El mismo que está en nuestra cultura, en nuestras hazañas deportivas y científicas, y en cada logro comunitario.
San Salvador ciudad de todos
Después del traslado de varios criollas que vivían en la zona de Arroyo Grande, llegaron los primeros inmigrantes de origen ruso-alemán.
El 25 de mayo de 1890 se emplaza un destacamento policial y el juzgado de paz, y hacia 1891 la primera escuela elemental.
No sería sino hasta el 4 de octubre de 1902, cuando gracias a las gestiones del entonces administrador, Don Francisco Malarín, se inaugura el ramal ferroviario entre Villaguay y Concordia permitiendo la conexión con la Estación San Salvador y la llegada de nuevos pobladores, en su gran mayoría inmigrantes de origen europeo.
El 2 de abril de 1912 un nuevo ramal entre las Estaciones de Caseros (Dpto. Uruguay) y San Salvador permitiría una mejor conexión entre la colonia y el Puerto de Concepciòn del Uruguay, factor determinante para el desarrollo económico del naciente poblado.
Entre 1900 y 1930, siete colonias de la Jewish Colonization Association (JCA, en ídish ICA) se fundaron en torno a San Salvador, con más de 400 familias de origen ruso-judìo; que paulatinamente irían afincandose en la colonia fundada por Malarín, sumando agricultores, artesanos y comerciantes.
En 1929 el Coronel Malarín, construye el Molino Harinero y se radica definitivamente en San Salvador hasta su muerte, ocurrida el 7 de diciembre de 1943. El Molino permite a los colonos agregar valor a su producción y se considera a este hito como el inicio de la cultura industrial de la ciudad.
El colono de origen suizo de habla francesa, Felix Bourren Meyer, realiza la primer siembra experimental de arroz, en la margen izquierda del Arroyo Grande en la primavera de 1930. Para 1932, el cultivo se extiende por toda la zona rural de San Salvador.
En febrero de 1948, los colonos Minuchin, Najenson y Resnitzky traen el primer molino arrocero y crean el Ingenio Arrocero San Salvador (INGASSAL), iniciando la industria de este cereal en la localidad. La sociedad es vendida y el 4 de marzo de 1952 se crea la Cooperativa Arrocera San Salvador Ltda, la primera en su tipo en América Latina.
El 19 de junio de 1953 se realiza la Primera Fiesta Nacional del Arroz, con un desfile alegórico y almuerzo donde es coronada la 1º Reina Nacional del Arroz. Desde entonces, San Salvador es conocida con el mote de “Capital Nacional del Arroz”.
El 2 de octubre de 1957, San Salvador es declarada ciudad. El ejido municipal permaneció dividido entre los Departamentos de Colón y Villaguay hasta 1979, cuando es transferido un sector del distrito Lucas al Sud del departamento Villaguay que era parte del ejido de San Salvador, al distrito Quinto del departamento Colón, del que hacía parte el resto.
En 1995 comenzó a darse forma real al proyecto de creación del departamento San Salvador, con cabecera en la ciudad homónima; anhelo que venía desde la década de 1960. Finalmente el proyecto, presentado por los diputados provinciales Hugo Oscar Berthet (PJ) y Carmen Reynoso de Vinacur (UCR), fue aprobado en la Cámara de Senadores de la Provincia Entre Ríos a la 01:30 del 6 de diciembre de 1995 y oficializado por ley provincial n.º 8981, del 8 de diciembre de ese mismo año.
RELIEVE
La ciudad se levanta sobre una zona suavemente ondulada, representada por la Lomada Grande. Con una media de 73 m.s.n.m., San Salvador, es la cabecera departamental más alta de la provincia de Entre Ríos.
El paisaje se caracteriza por terrenos de suaves declives y presencia de acuíferos a escasa profundidad, lo que hace que sus suelos reúnan condiciones óptimas para el cultivo del arroz, principal sustento de la economía local.
El Acuífero San Salvador (antes también llamado Salto Chico) es una potente reserva de agua dulce de 60 metros de espesor a unos 30 metros de profundidad, una formación geológica de la Era Cuaternaria (Pleistoceno Inferior) que es antiguo cauce enterrado del Río Uruguay. El “acuífero arrocero”, como se lo suele llamar es utilizado principalmente en el riego de la producción arrocera y la calidad del agua es muy buena para consumo humano. La zona de San Salvador, tiene hasta 12 veces más disponibilidad de agua dulce que el promedio nacional.
San Salvador presente suelos de tipo vertisoles, son suelos negros muy oscuros difíciles de trabajar ya que tienen un elevado porcentaje de arcilla expansiva. Son aptos para el cultivo, aunque la capa fértil es muy delgada. Entre Ríos y Corrientes son los únicos lugares del país en donde se encuentra este tipo de suelos.
CLIMA
El clima de la región es templado, característico de la Pampa húmeda, sin situaciones climáticas extremas y apto para ganadería y agricultura.
En San Salvador, los veranos son calurosos y húmedos; los inviernos son frescos. Durante el transcurso del año, la temperatura generalmente varía de 7 °C a 32 °C y rara vez baja a menos de 1 °C o sube a más de 37 °C.
El promedio del porcentaje del cielo cubierto con nubes varía considerablemente en el transcurso del año. La parte más despejada del año en San Salvador dura 8 meses entre agosto y mayo. El mes más nublado es junio.
La temporada con más precipitaciones dura 7 meses, del 30 de septiembre a 29 de abril, con una probabilidad cercana al 27 % en promedio. La temporada más seca dura 5 meses, del 29 de abril al 30 de septiembre. El total anual de precipitaciones es abundante, 1200 mm y la humedad promedio ronda el 60%.
FLORA Y FAUNA
La zona presenta un tapiz herbáceo, sólo interrumpido por formaciones arbóreas cercana a los arroyos. La expansión de la actividad agrícola hace que la zona esté fuertemente parcelada, lo que afectó el hábitat natural de muchos animales. El ambiente húmedo que se utiliza para el cultivo de arroz atrae a aves acuáticas, roedores y pequeños mamíferos.
PARQUES Y PASEOS
La Plaza 25 de Mayo es en el centro neurálgico de la vida social de San Salvador, un gran espacio verde que contiene el monumento al General José de San Martín y el Monumento a la Madre. En frente, encontramos el Parque Eva Perón en el que se puede conocer la historia de la ciudad a través de varios murales.
La Plazoleta del Centenario, contiene una de las postales más típicas de San Salvador; el Mural del Centenario y las letras corpóreas con el nombre de la ciudad. Las plazoletas de Avenida Malarín, invitan a un viaje por los personajes y fechas históricas del país y la ciudad; allí encontramos los espacios públicos dedicados al Fundador, a Belgrano, a la Paz, a los Agricultores, Pueblos Originarios, los Pioneros, la Democracia, el Milenio y el Bicentenario, entre otros.
Además los Parques del Centenario, de La Fraternidad, Ferrocarril, Pancho Ramírez, Parque Nativo, entre otros, se encuentran renovados para el disfrute de vecinos y visitantes.
CALLE SAN MARTÍN
Es la arteria vial donde se encuentran los principales edificios civiles y religiosos de San Salvador. En un recorrido que de 500 metros que va desde la Estación del ferrocarril al Museo del Arroz, podremos conocer la Parroquia Santa Teresita del Niño Jesús, la Sinagoga Torá Moshé, el antiguo cine Sala San Martìn, el histórico Buzón Postal, el edificio del Banco Nación y la antigua Municipalidad, entre otros edificios y casas históricas de la ciudad.
VILLA AURORA
Es el edificio en pie más antiguo de la ciudad, data 1890, aunque fue ampliado y modificado en varias oportunidades. La propiedad pertenece a la Familia Malarín y sus sucesores, aquí funcionó la Primera Administración de la Colonia San Salvador. Contigua, se encuentra la Capilla El Salvador, construida en 1912 para uso familiar, es el primer templo religioso de la ciudad. El retablo mayor fue traído desde Francia y la Virgen de Nuestra Señora de los Dolores tiene detalles en oro y cristal. Desde el año 2000, la capilla pertenece a la Diócesis de Concordia.
CASA DEL FUNDADOR
Construida en 1929, con claras reminiscencias pintoresquistas, la residencia del Coronel Malarín se eleva con una torre inconfundible. Complementan el conjunto arquitectónico, las estructuras del antiguo Molino Harinero. Actualmente funcionan aquí la Administración de la Cooperativa Arrocera de San Salvador y la Extensión Rural del INTA.
ESTACIÓN DEL FERROCARRIL
La confluencia de dos ramales ferroviarios hizo que San Salvador posea dos estaciones a lo largo de su historia. La primera, de chapa, construida en 1902 es un modesto edificio con galerías; la segunda de material, data de 1912 y fue construida por el Ferrocarril Central Entrerriano, con capitales ingleses.
La estación del ferrocarril replica una tipología arquitectónica consolidada en sus aspectos funcionales. Albergar pasajeros, oficinas de mensajerías, despacho de encomiendas y la vivienda del Jefe de estación. En el diseño, podemos constatar las principales características del movimiento academicista francés: la perfecta simetría -caracterizada por una composición austera en la planta- y en la fachada, la presencia de un lenguaje historicista ecléctico.
Desde 2010, funciona el Museo de la Estación, que recopila parte de la historia ferroviaria de la ciudad.
MUSEO DEL ARROZ
Único en su tipo en la Argentina, el Museo funciona en el antiguo edificio de la Comisaría, construida por Malarin en 1929. En sus 6 salas y patio se puede ver la evolución histórica de la ciudad, ligada indefectiblemente a la del arroz, la industria, los pioneros e inmigrantes.
El Museo ofrece recorridos interactivos con personajes animados que van guiando a los visitantes por cada una de sus salas.
BATALLA DE ARROYO GRANDE
La batalla de Arroyo Grande se desarrolló en las inmediaciones de ese curso de agua cercano a la actual ciudad de San Salvador, el 6 de diciembre de 1842. Uno de los combates más grandes e importantes en las guerras civiles argentinas y uruguayas.
Fue una victoria del ejército federal porteño-entrerriano, dirigido por el expresidente uruguayo, brigadier Manuel Oribe, sobre una alianza de colorados uruguayos y unitarios argentinos (porteños emigrados, correntinos y santafesinos), dirigidos por el presidente de ese país, brigadier Fructuoso Rivera. Esta batalla terminó una de las más violentas guerras civiles en la Argentina, y comenzó la llamada Guerra Grande en el Uruguay.
A 3 km hacia el Este del casco urbano de San Salvador, se encuentra el Monumento a los Caídos en Arroyo Grande, un homenaje a quien dejaron su vida en defensa de la Patria y la integridad de nuestro territorio.
Recopilación histórica en base a texto de Magdalena Pandiani de Chemin, Heriberto Maria Pezzarini, Mirta Metzler de Martinez, Matías Nicolás Rodríguez y relatos orales.